Escritores locales

Este espacio tiene la intención de reconocer a valiosos escritores que con la autenticidad de su lenguaje poético,  permiten vivificar,  a través de su visión, sentimientos y experiencias de distintas realidades que van  construyen  la razón histórica de nuestra localidad: Cd. Juárez Chih.

COMO COMUNIDAD DEBEMOS RECONOCER  Y APLAUDIR  LAS VIRTUDES  DE NUESTRA GENTE.

Agradecemos a Héctor Moreno Soto, escritor de la localidad por permitirnos compartir  el siguiente  escrito  que a través de sus letras revive momentos de angustias, soledades, miedos y alegrías recordando su inicio de nueva vida en Ciudad Juárez.



                                         CUAL MIEDO.?!!

 LAS PERSONAS QUE HEMOS PASADO POR

 CIERTAS CIRCUNSTANCIAS EN LA VIDA

 COMO "ESTAR DESEMPLEADO", ABRIR LA ALACENA DE TU 

 COCINA Y ESTAR COMPLETAMENTE VACIA, ES MAS NI SIQUIERA

 TENER CONDIMENTOS O SAL, EL QUE TUS CRIOS TE DIGAN QUE

 TIENEN HAMBRE, PEDIR FIADO AL TENDERO DE LA ESQUINA,

 DEBER LA RENTA, LUZ, AGUA, GAS, MUEBLERIA, BANCO, ETC.

TENIA UN AUTO, ESTE ERA MINIMO 25 AÑOS DE ANTIGUEDAD

 Y NO HABIA PARA GASOLINA MUCHO MENOS PARA REPARARLO.

 DESDE LA VENTANA LO VEIA ESTACIONADO, SIN MOVERSE,

 ERA SOLO UN ADORNO DE LA CALLE.  Y DE PILON NOS ROBABAN

 HASTA LA TV, STEREO Y LA LICUADORA. QUE EMPEÑABA?

 PASABA AL LADO DE UNA CAFETERIA O RESTAURANT Y 

 CONTEMPLABA A LOS COMENSALES DESDE LA VENTANA

 "TIPO PELICULA", VERDAD DE DIOS, VIENDOLOS A TRAVES

  DE LAS VENTANAS COMO SABOREABAN, CONVERSABAN

 Y DISFRUTABAN DE SUS ALIMENTOS 

 METIA MIS MANOS DENTRO DE LAS BOLSAS DE MI PANTALON 

 UN SIN FIN DE VECES, TAL VEZ CREIA QUE DE TANTO SOBAR,

 COMO EN LA LAMPARA DE ALADINO, APARECERIA EL GENIO

 CON EXQUISITOS MANJARES Y TESOROS, "PERO" ......

 OH SORPRESA, SOLO SACABA PELUZAS.

 ME DIRIGIA A BUSCAR CHAMBAS A PIE, PUES NO TENIA PARA

 LA FAMOSA "RUTERA' EN ESOS TIEMPOS.

 YO JAMAS ME IMAGINE QUE ESTO ME SUCEDERIA.

 UNO NUNCA ESTA PREPARADO NI ESTARA PARA

 TODO LO QUE SE VIENE.

 NADIE ME AYUDABA. AHI SENTI SIN SABERLO LO QUE ES

 ENTRAR EN DEPRESION. CUANDO Y EN QUE MOMENTO SALI?,

 NO LO SE.! NUNCA LO SUPE. ES MAS, NI SIQUIERA SABIA "QUE 

 ERA LA DEPRESION". NO SE CONOCIA NI SE SABIA MUCHO

 AL RESPECTO. LO SUPE AÑOS DESPUES.

 CULPE A DIOS DE TODO LO QUE SUCEDIA, RENEGUE,

 MALDECI, LA IRA ME CONSUMIO.

 EN FIN, ES POR ELLO QUE CON ESTAS LECCIONES DE VIDA, ENTRE

 OTRAS MAS, CUAL MIEDO A UN BICHITO, O INCLUSO A LA

 MUERTE, CUAL MIEDO.?!!!

 CUANDO UNO TOCA FONDO, DE AHI PARA ARRIBA NO QUEDA

 DE OTRA O TE QUEDAS EN EL FONDO.

 ASI QUE LA FORMA DE VER Y VIVIR LA VIDA ES MUY DIFERENTE

 A QUIENES NUNCA HAN PASADO X CIERTAS CIRCUNSTANCIAS.

 NI TAMPOCO ES OBLIGATORIO PASAR POR ELLAS.

 NO CABE DUDA QUE EL PADRE A CADA UNO NOS PREPARA

 DE MANERAS TAN DIFERENTES PARA AFRONTARLA Y VIVIRLA.

 LA VIDA, EL PLANETA, SON HERMOSOS

 LO QUE HAGO HACE LA DIFERENCIA.

 YA DESPUES DEPENDERA DE MI OPTICA.

 MI PADRE ME DIO LA PREPARACION, CONDICION FISICA, 

 ESPIRITUAL Y EMOCIONAL PARA ADAPTARME PERFECTAMENTE

 A ESTOS TIEMPOS.

                                        CUAL MIEDO....?!!!

     "PAZ EN LA TIERA A LOS HOMBRES DE BUENA VOLUNTAD"

BENDICIONES.

NOS ESTAMOS VIENDO, SI EL PADRE ASI LO DECIDE.

HÉCTOR MORENO SOTO 

Agradecemos a Jorge Nicolas Herrera, escritor de la localidad por permitirnos compartir  el siguiente  poema  que a través de sus letras revive momentos de alegria y  amistad, y además da permanencia  al recuerdo  de nuestro padre Javier Venegas.          

La casa de la 5 de Mayo

Caminando por la calle 5 de Mayo de la Colonia Partido Romero 

Vino a mi mente lo primero 

Mi infancia 

Y mi 

Adolescencia 


Me acerqué a la casa y me recargué en su barandal,

Sentí un escalofrío en forma total, 

Miraba que aún  conservaba sus tejas ahí sostenidas 

En forma  real.


Veía sus puertas y ventanas  y me preguntaba,

Si aún su calor conservaba 

De toda la gente

Que de ahí se asomaba: 


Su calor y su esencia aún se sentía,

O al menos yo así lo creía,

Se me afiguraba que yo los veía;

A mi abuelita y a mis padres, y a mi tía.

Antes había  un Fresno enorme,

Ya lo habían quitado, 

Pues no les había importado. 


Pues ese árbol  había crecido con  nosotros 

Desde que eramos niños,

Testigo de nuestros cariños e ilusiones.

 Y les había estorbado. 


Había un porche con sus bardas de cemento

Que por ser pequeñas servían como asiento, 

Dónde ahi sentado se pasaba el tiempo lento. 


Aún estaba un pasillo que dividía 

Las dos propiedades adjuntas, 

Pues se habían construidas tan juntas.

 

El edificio de el Señor Alarcón hoy convertido en hotel

Y la de Roque Olivas ,

Cómo en el tiempo aquél

Sus paredes ahí se habían  quedado 

Con todas las tristezas y alegrías

De todos esos días,

De esas épocas vividas. 


Enfrente Javier Venegas vivía 

En una propiedad que ahí había,

Aún funcionaba como si nada hubiese pasado.


Pero el tiempo 

Estaba marcado

Javier, Tavo y un servidor 

Que cada quien siguiera su vida 

Por su lado;

Y causa nostalgia y dolor

Después de la infancia juntos haber pasado 


Vino a mi memoria 

Haciendo un poco de historia 

Que por la Avenida Vicente Guerrero 

Frente a la Botica Del Valle 

Había un local donde

Con todo. esmero

Y con todo detalle

Rentaban libros, era de verdad 

Como nuestro  internet en la actualidad;

Con semillas, una grande soda 

Y leyendo toda

La tarde,

Sin prisa sin alarde 

Disfrutamos de verdad

A Memin Pinguin, al famoso Kalimán 

Y sentados en una grande banca como Imán


La casa de la esquina del Chato Alarcón 

Aún conserva a la vuelta el portón, 

La barda forrada de ladrillo simulando piedra  aún resiste

Y el tiempo sigue su marcha y existe.


Y miraba yo triste

A todas las casas de enfrente con gentes extrañas

Porque desde las mañanas 

Salían a barrer y a  regar 

Y nunca dejaron de saludar.


Se vinieron a mi mente los sonidos 

De la campana de la basura, y su camión 

Mantenia a los vecinos unidos 

Porque había comunicación:


Y lo más bello y hermoso que se veía,

Cuando pasaban las chicas de la escuela Bilingüe parecía una romeria.


Pasaba el del periódico El Fronterizo, El Correo,

Y parece que también veo 

Gritar El Mexicano,

El periódico vespertino muy de la  mano 

Se oía al de los elotes y una vitrina

De vidrio vendiendo la gelatina.


Y así tantos recuerdos de esta calle, 

Cada sonido, cada detalle, 

Y hoy que me retiro 

Siento como quedan las cosas materiales:

Y aunque suspiro,

Hay cosas que no puedo olvidarlas;

Cómo cuando como Manantiales 

Se formaban enormes charcos cuando llovía 

Y Lupe, Héctor, Carlos y René mis  hermanos

Metiendo los pies en los charcos disfrutamos.


Había un señor que vendía 

Fruta melón y rebanadas de sandía,

Otro traía galones de naranja y de uva, 

Los bolis de agua y de leche en una tuba

Hecha de aluminio, 

Y era  el domingo tanta

 la gente que salía a comprar. 


Y ahora que me retiro ya de este lugar 

Nunca he podido olvidar 

A todas esas gentes 

Que hoy están ausentes,

Pero la calle 

Conserva cada  detalle 

Y me voy a alejar 

Pero mi corazón 

Con toda razón 

Se queda en este lugar, 

Y la nostalgia no la puedo evitar.


Jorge Nicolás Herrera.


Aquí en Ciudad Juárez Chihuahua México, había hasta los años 60, s  un  espacio , bardeado donde era para automóviles , con un poste con bocina  al lado , y una pantalla gigante , y un cuarto de proyección  llamado :


Auto Cine Juárez


Una vez existió, El Autocine Juárez

sobre la  la carretera Panamericana

en un lado El Carrousel, de otro el Bolerama

Daban estrenos, sobre todo cinta mexicana

Era una novedad, aquí en Cd. Juárez

Cine al aire libre, hermoso lugar familiar

Donde en la ventana se ponía el auricular

En su dulcería, también se vendía lo regular

Palomitas, sodas, chocolates, dulces

Y ahora he comprendido, y no antes lo deduces

Porque a veces, los autos, solos se movían

Mis ojos infantiles, no sabían

Pero nosotros a lo nuestro a disfrutar

Y una bella mujer, con un bello cantar

La española Sarita Montiel

El Ultimo Cuplé , bella mujer, dulce mirar

Ya era de colores el montaje aquel

Pero para soportar el calor , al cofre nos subíamos

Ahí gozábamos, del ambiente  y comíamos

Alimentos preparados en la casa, incomparables

Y esos son momentos inolvidables

Películas en blanco y negro, y algunas ya de colores

Gozábamos de todos los sabores

También las raspas, las nieves

También veíamos el cielo, las nubes

Y tantas y tantas cosas que ves

Como mirar al cielo cual terciopelo

La luna, y todas las estrellas

En la pantalla, las mujeres bellas

Y el aire, que movía nuestro cabello

Que bello disfrutar de ambas cosas

Pero en familia, resultaban mas hermosas

Momentos inolvidables de la vida

Y que ahora el pensamiento, me convida

A nunca olvidar, esos momentos

Con grande tristeza y sentimientos

De volver a los momentos, de esa vida

A veces parecíamos escuchar, ahí enseguida

La música del Carrousel, y su alegría

La gente que de el Bolerama ahí salía

Con grande corazón y algarabía

Recuerdo en una ocasión, al cácaro trabado

Y la forma de reclamación, pitaban lo carros con estruendo

Haciendo de esto un sonido tremendo

Que el pobre casi, salía golpeado

Cuando la función se terminaba

Todo el mundo quería salir en un momento

Y cuando llovía, y el piso se mojaba

Se hacía un tormento

Salir de su estacionamiento

Pero todos esos pequeños detalles

Son de momentos inolvidables

De momentos familiares y sociales

Con la tranquilidad, también de sus calles

En las casas, no habían a veces barandales

Los esprines, eran solo de madera

Para protegerse de los moyotes a raudales

Pero con una seguridad duradera

Que sabroso era, traer, mis padres de la casa la comida

Juntos disfrutábamos de la vida

Compartiendo el amor y la familia

Y en cuaresma, guardábamos la vigilia

Nos llevaban, de refrescos, los famosos jarritos

De mandarina, de fresa, de piña, y tamarindo

A que tiempos tan benditos

De sabores exquisitos

De dulces, las gomitas, y los barrilitos

Que momentos, y por eso, ahora brindo

Cuando la película no nos gustaba

Jugábamos con el trompo de madera

Con las canicas, ahí mismo afuera

La vida así, se disfrutaba

Recordando en cada película, una gran aventura

Que para nosotros en la inocencia, una caricatura

Por eso al aire libre, se disfrutaba

De todo lo que la vida nos brindaba

Pero éramos muy ricos, sin tener nada

Pero todo eso se alternaba, con el frío, la lluvia , la nevada

Que antes frío hacía, llovía y nevaba

Pero disfrutando de todo aquello, que la vida nos brindaba

Éramos felices, y no lo  sabíamos

Y lo gozàbamos

Por eso los recuerdos, que gozamos

Donde en familia disfrutábamos

Me trae recuerdos inolvidables, y ese es el tema

Sí el tiempo detuviera en tramos

No solo le escribiría , a la vida un poema

Sino volver, a esa vida tan amena

Que pasamos en el……….Autocinema.


Jorge Nicolás Herrera.


Agradecemos a Oscar Sánchez, escritor de la localidad por permitirnos compartir algo de su escritura en su vocación literaria.

Al Escribir (16)

La literatura, hay que decirlo y tenerlo en cuenta, no es muy importante. Sólo es una bella forma de comprender el entorno. Es el sagrado suspiro que dilata la matriz de la imaginación abrupta, y sólo es la imagen que de niños perdimos y que se oculta en el naufragio del alma. No encuentro su utilidad, no llega el empleo deseado; todo tiene que tener una recompensa monetaria inmediata. Se pierde entre conceptos tan absurdos como complejos para la creación literaria. Estilos entre poetas y narraciones se subyace el pincel. El riguroso dogma milimétrico pone entre micra y micra la letra y su sentido. De qué sirve un poema en hoja al casquillo. La psicosis se apodera de la Muerte exhausta. Y la literatura cumple muy bien su función dignificando esas muertes. Simples se guardan en estantes, callados libros como de quienes se escriben; no sirven para nada.

El loco que me sigue se burla a mi espalda y mi lágrima sangra la desesperación del poeta. El retrato que pinta mi vida es tan oscuro y opaco; no me ha dejado nada. Perezoso albañil emparedando los libros manchados con tinta roja. Cumplo mi función sí, como el más indefenso animal que requiebra en lágrimas tras comer los intestinos de una víctima más. Ni si quiera soy capaz de brindar una ayuda verdadera a esos familiares; ni un abrazo, ni un pésame. Pero aquí sigo más guardado que un libro escribiéndome a mí mismo. Cobarde y soberbio discuto con los que discuten de libros, pero no más. Literariedad, conocimiento, libros, teorías, talento, creación, discusión… ja, ja una lista interminable de un chiste vacío. A nadie le causa gracia, a nadie le importa. Pero aquí sigo creyendo ser el más intelectual de los intelectuales. Como un loco que cree ser el héroe de su historia así todos creen ser el salvador en la propia; simios sin pelo y libros, brillante recompensa.

Pero quién me incita a escribir. ¿Es esa voz, una conciencia superior, mi pasado genético? Aún no existe una respuesta clara a mis dudas. Lo que sé es que imagino, sueño y creo. Tengo que expresar algo de lo que conozco. Quiero que sientan lo que siento, quiero que crezcan como crezco, quiero que vean lo que veo e imaginen lo que imagino. Escribir, más que nada es una necesidad, es arte, es alma impresa. Gracias musa, gracias por no dejar que me agobie el estrés, que me consuman las personas. Gracias por detener el tiempo a mi alrededor y escaparme en estos párrafos. ¡Quiero que lean, quiero que griten, quiero que escapen y destruyan todo a su alrededor! Porque es cierto, la mente grita, ríe y juega; escapa. 

Pero, al fin y al cabo, qué es escribir: ¿un acto del ego, un camino al éxito, una forma de auto valorarme, represión? No quiero ser parte de esto, porque sé que lo es, pero también es algo más. Yo no pienso en crear historias. La mente ya hace las historias, yo sólo las redirijo, las complemento con el razonamiento, pero ya existen aun antes de que las piense. La escritura, junto con muchas otras formas de expresión responden a una energía creadora. Aquí expongo como verdad mis creencias, creencias que se vuelven verdad. Pero esta verdad, tal vez ficticia, sea un mundo para alguien, su salvación para otro, su revelación, un chiste, una broma, una ofensa, pero mi energía y mi mente están aquí; juntos leemos, juntos nos impresionamos, juntos debatimos y juntos razonamos. Todos, en este momento somos más íntimos que lo íntimo. La escritura une las mentes y en una instancia más profunda, mezcla las almas.


Autor.

Óscar Sánchez Torres (Ópak) 

Opak De Santo (Facebook)